08 marzo, 2010

>>

Este estado es curioso. Uno se encuentra en el limbo de su personalidad. Las cosas, al darles menos importancia, se vuelven preciosas. Y se ignoran.
Por el miedo a lo que representan. Ese pie se ha ido. No te esperó. ¿Tú esperarás al tercero?

Envejecemos juntos sin siquiera saberlo. Entrevemos el velo de nuestro tejido, sin saber. Si será real. ¿Serán la carne de los muertos? Este estado, tan inmenso, te sumerge en el espejo de las repeticiones. Tan rápido que es estático. Todos gritando lo mismo.

07 junio, 2009

MISMO

La otra latitud resultó ser exquisitamente embriagante. El aire era cálido, denso, palpable. Sabía a sal y aceite. Conocí a un hombre aniñado. En él, funjo una divinidad doble de cuidadora y cuidada y no sé por qué ha llegado a ser tan entrañable. Probablemente no sea cierto, y todo esto lo esté imaginando, falsas percepciones que cazan mis pasos.

Lo juzgo fríamente. Él es como las cosas antiguas, funciona para casi toda la vida.

NADA

Se desvaneció en la cortina roja, gozando el contacto del momento.

Sin darse cuenta descendía. El beso de la tierra.

Salió del trozo de quinientos días, tan lejanos que pareciera fue hace una fracción de segundo.

Satisfizo los deseos de sus muñones.

22 abril, 2009

ENSOGA

Qué insípida es mi palabra, confusa que llena un vacío de otro, mecánica de ocho cuerdas.

Un trozo late atado en la caja negra, cuerdas de cachemira laceran, palpita rojo mientras las tensa. Anestesiado, se entumece mientras espera. Mientras espera que al eco de la ola se lo coman las piedras.
Atacó sin darme cuenta, masa de agua imparable, el beso del cielo despierto en su frente. Extendió su cortina disolviendo la frontera de los días. La caja negra viaja en la gelatina del viento.

23 febrero, 2009

GUERRA

El pelo envuelve fieramente su cara mientras trata de tumbarte, el reflejo de la calma brilla en tu cara. Embiste repetidamente poniendo en práctica nuevas estrategias, utiliza la fuerza, astutamente aplica estratagemas. Tú, sentado en una orilla, repeles los asaltos. Pedazo de concreto que, inmóvil, deja resbalar la lluvia.
Cada fracaso alimenta su ímpetu, pintando el aire de rojo parece aumentar su tamaño, continuando una guerra adversa que ni siquiera te toca. Se alza y cae pesadamente como una ola, sus formas caprichosas tratan de inundarte. A tu alrededor las cosas se destruyen, se revuelven. Permaneces donde estabas, bamboleándote sólo un poco y sonriendo por dentro.
El calor aumenta, envolviéndolos en una manta gruesa que comienza a mitigar su fuerza. Se tumba con movimientos cansinos y doloridos a tu lado. Observando cada una de sus partes, le encuentras una pequeña astilla, piececilla del rompecabezas de tu piso. Tomas unas pinzas y la sacas. Lavas y confortas el piquete. Su rostro te agradece, duerme profundamente. Acomodas su pelo y susurras sin palabras tu afecto.

05 enero, 2009

PUEDES

Hoy te vi sentado a la orilla de mi mano, tu nariz alta en el aire decodificando la música, oliendo síncopas y triadas.
Tu respiración era acompasada como el sonido quebrado del atabal, una cadencia que tu corazón no respetaba, haciendo de aquello un lío de espacios.
Tenías melancolía chorreándote del pelo, mezclada con nuevos claros trenzados en tus ondulaciones. Los sonidos que lentamente poseías mientras te poseían te balanceaban entretanto, alga y viento, más cerca estabas de la orilla.
Te solté mientras flotabas en el humo aderezado de frutas, ayudado por dedos ágiles. Nunca tocaste el piso, te encerraste en el túnel de tus ojos, descendiendo únicamente en el légamo de tus pensamientos.

15 diciembre, 2008

NACES

Y con el tiempo, poco a poco, tomaste conciencia de lo sucedido. Te enganchó de lo más alto de la roca, tirándote con delicadeza el pelo, sembrando sombras y escupiendo fantasmas. Avatares ficticios, caras falsas de dados planos.
En tus entretelas pinchó su caricatura, dejándole descansar sus dedos entre tu pelo, sus labios en tu cabeza, su sexo en el tuyo.
Hoy despiertas en medio del torbellino de papeles, tirando gasas, escupiendo venenos. Hoy despiertas para ver
Más allá del risco
A una imagen
Inexistente.

13 octubre, 2008

HALO

No soporto ver lo rápido que te alejas, ni lo lento que huye tu cuerpo. Tu mirada
deambulante, inquisitiva. Mi tortura cuando no estás y mi indiferencia cuando te encuentras junto a mí.
Ya no te escucho, solo quisiera silencios. Espacios reveladores de lo que queda. Quisiera quererte, tan querido como lo fuiste alguna vez. Quisiera decirte que la mentira no existe, que mi mente se queda cuando estás. Que estamos solos tú y yo, otra vez encima de la carretera, cantando y corriendo. Sabiendo que amaneceríamos bajo un techo de pinos entre sábanas blancas y con amor en los ojos.
De verdad quisiera.
Pero no puedo.

22 septiembre, 2008

RAVANT

Ravant hace su aparición. Con su plectro juvenil y desnutrido. Sonriendo y haciendo gracias absurdas. Emociona. Uno cae bajo una ilusión efectista. Preso de su turbio encanto. El compás adormecido y sinuoso. A veces es raudo. Es en otras incierto.
Su ritmo te mira. Con ojos de invierno. En un lago estival. Te anestesia sin saberte anestesiado.
Y no te das cuenta. A lo lejos baila Ravant. Con su poesía depauperada.

17 septiembre, 2008

TIFON

Todo llevó al desenlace que necesitabas. El recuerdo surrealmente vívido del níveo piñón, desajustes hormonales, el pánico del año, ideas irracionales y demandantes. Influjo de sustancias, comportamiento hostil. Interpretaciones narcisistas de miradas indiferentes turbaron tu mente, volviéndote cínico en medio de tu ridiculez.
Explotaste, igual que la otra parte.
Explotaste, dejando tras de ti mentiras que traspasaron el último umbral de la agonía espiritual.
Sus ojos de árbol te miraron derribados, haciendo correr ríos de savia por su cara. De su boca mutable salieron signos de intensa desesperación, cambiando por completo su estructura, haciéndola a veces recta, a veces maltrecha.
El viento barrió tus pedazos, hojas de ceniza se posaron suavemente en el suelo juntándose pausadamente...tejiendo tus puntos con cuidado. Saliste de la manta delicada, formándote tan nuevo como lo fuiste tiempo atrás. Te acercaste a él otra vez abrazando sus entresijos, su maslo caído se dobló, buscándote afectuosamente. Hecho un ovillo en la cueva de sus raíces lo volviste a ver. En sus manos. En los labios. Dentro de tu frente.
Sólo así supiste…
que, a veces, para siempre existe.

09 junio, 2008

ESA

Cuando te diga que tienes una rata de por vida, no me creas. En las despedidas o afirmaciones a uno se le sale la pulpa, pero después vuelve la cáscara y jamás (por lo menos en el campo provocado) nos volveremos a ver.
Puedo cambiar de opinión sobre ti tan rápido como un latigazo, sobre todo si ésta tambalea…y si toca el piso, es probable que eche raíces. Rara vez me preocupo por lo que se cae. Si me perforaste, te irás para abajo de todos modos…suavemente. Y cargaré conmigo tu retrato como un prendedor del inconsciente.
Nunca estoy del todo contigo. Contradictoriamente, entiendo todo lo que dices…y es raro que tiempo después lo olvide.
Me gusta hacerte reír y pensar que te fui de ayuda. Es gracioso…quiero que mueras, pero también que vivas bien.
Estoy enojada con él, ella o tú, sin saber ni ellos ni yo la razón. Tormentas impredecibles, que…a ser sincera…últimamente han sido rebajadas a tristes lloviznas.
‘La cáscara es muy dura porque dentro es blandísimo’, es lo que dicen de manos frías como yo. Puede ser verdad, puede ser falso, tal vez no lo se.
Este es un pequeño tratado de mí para mí. Así eres, y aún así te aprecias…que bueno que estoy dentro de ti.